Alquiler de barcos en Lisboa · Jeanneau — Selection 37 (1984)

A bordo del Águalevada, ofrecemos experiencias náuticas únicas en el río Tajo, combinando el espíritu de aventura con la belleza inconfundible de Lisboa vista desde el agua. No es sólo otro paseo en velero; es una experiencia auténtica, diseñada para crear momentos memorables y genuinos. El Águalevada es un Jeanneau Sélection 37, un velero histórico de regatas que hemos restaurado con pasión y respeto por su legado. Conserva todo su ADN de rendimiento, ofreciendo una navegación ágil y envolvente, mientras garantiza la comodidad necesaria para una salida relajada. Tiene capacidad para hasta 8 personas, baño a bordo y todo el equipo de seguridad requerido. Precios: Navegación en Lisboa 385,00 € de lunes a jueves 400,00 € de viernes a domingo Horarios de salida: 10:00 | 14:00 Sunset 450,00 € todos los días Horario de salida: 18:30 Queremos que cada invitado se sienta parte de esta historia. A bordo, no eres sólo un pasajero, eres parte de la tripulación y del alma del barco. Somos un equipo de padre e hijo, ambos apasionados por el Tajo y el mar. -Mário Picoto, Patrón Costero, creció en Lisboa y lleva consigo un profundo respeto por el río y la tradición marítima portuguesa. - Mário Rodrigues, Patrón Local, equilibra su vida entre el mundo digital y la libertad que encuentra al timón del Águalevada. Juntos, recibimos a cada invitado con hospitalidad, atención y una verdadera pasión por compartir. Zarpamos desde el Muelle de Alcântara, en pleno centro de Lisboa, y desde aquí el río se convierte en escenario para experiencias que pueden ir desde un paseo romántico al atardecer, hasta un evento de equipo o una mañana en familia. En el camino, navegamos bajo el Puente 25 de Abril, pasamos junto a la Torre de Belém, el Monumento a los Descubrimientos, el MAAT y el Terreiro do Paço, siempre con Lisboa como telón de fondo. Cada salida es única y se adapta al ritmo y los deseos de quienes navegan con nosotros. No seguimos un guion cerrado; dejamos espacio para el viento, el río y los pequeños momentos de belleza que surgen en cada curva. Porque más que un paseo en barco, nuestra misión es crear conexiones: con la ciudad, con el mar, con nuestro legado marítimo y, sobre todo, con las personas que recibimos a bordo.